Perfecta para matar ese gusanillo de pizza que tanto nos pide el cuerpo, sin caer en la tentación.
Y es tan fácil como mezclar 1 cazo de la mezcla de Oat Protein Pizza con 30 ml de agua y llevar la mezcla a una sartén previamente engrasada. Yo he usado aceite de oliva en spray de LifePro para engrasarla.
Damos forma a la masa con una cuchara y dejamos que se haga a fuego bajo-medio.
Le damos la vuelta y ponemos los ingredientes que más nos apetezcan. En este caso se ha puesto:
- Protein Tomato Sauce
- Pechuga de pollo
- Rodajas de tomate natural
- Calabacín
- Queso havarti light
Tapamos unos minutos para que el calabacín se haga un poquito y el queso se derrita y listo, a comerse una pizza sin remordimientos de por medio.